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| Visita a Los amigos de la Estación de Cabildo. |
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| La familia Fuster invitó a todos a comer un rico lechón al horno de barro y charló con los chicos sobre agricultura familiar. |
A las ocho y media de la mañana partió el bullanguero grupo de alumnos de 3° y 4° del CEPT A VISITAR LA LOCALIDAD VECINA DE Cabildo. Llegamos a las nueve y media a nuestra primera estación: la Cooperativa Sombra de Toro. En ella nos recibió nuestra guía de viaje, Alicia Gogorza, quien supo atrapar nuestra atención. Nos relato la historia de la Cooperativa, sus orígenes y demás información.
La Cooperativa: sus orígenes
La Cooperativa se creó por iniciativa de un grupo de productores en 1947 para satisfacer la necesidad de arreglar los caminos vecinales. El nombre se origina a partir de una leyenda aborigen acerca de la creencia de éstos que comparaban el anochecer con la sombra del toro. Nombre compartido con un arroyo, una planta y un cerro: “como si las raíces de la planta dieran pertenencia a la tierra elevando sus metas junto al cerro y nutriéndose con el fluir del arroyo que lleva más lejos las inquietudes”
El recorrido
Bajo la amable coordinación de Alicia recorrimos las instalaciones de la Cooperativa. Vimos las distintas oficinas, nos condujo a la sala de conferencias donde se reúne el Consejo de Administración de la Cooperativa. Luego marchamos hacia la planta de silos que pertenece a la Cooperativa, donde se nos informo de las distintas capacidades de almacenaje, como así también las distintas tareas que se llevan a cabo: transporte, almacenamiento, tratado de semillas, etc…
Juventud Agraria Cooperativista
Fue una gran experiencia conocer la gran biblioteca que posee esta Asociación y también conocer el bonito salón que ha sido marco de numerosos y gratos momentos.
Luego de despedirnos de Alicia y Roli partimos hacia la estación de trenes.
Segunda Estación
Aquí fuimos recibidos por los “Amigos de la Estación” que atesoran valiosos recuerdos de épocas pasadas. Un pequeño museo, donde pudimos observar calculadoras, maquinas registradoras, tocadiscos, etc. entre otros tesoros del pasado. Nos manifestaron que su objetivo es convertir la estación en un centro cultural que sea un paseo para los habitantes de Cabildo. Tomamos mates y comimos tortas, como así también disfrutamos de una muestra fotográfica. Nos enteramos que esta asociación trabaja en la estación cedida por el municipio que la tiene en comodato con Ferrosur. Luego de una calurosa despedida partimos hacia la siguiente estación
Tercera parada: los bomberos
En el cuartel de bomberos fuimos recibidos por Néstor, el presidente de la Comisión de Bomberos. Nos dijo que seria conciso y su charla duró……. una hora. Una charla muy esclarecedora con respecto a los valores que se destacan en un bombero: respeto, solidaridad, amor al prójimo y todas las cualidades que conocemos y rescatamos ellos. Luego nos mostraron sus instalaciones, sus vehículos conseguidos con esfuerzo y dedicación. Nos contaron cómo se utiliza un traje de bomberos, como se utilizan los distintos elementos de los camiones, como se organizan para las distintas emergencias, cada bombero tiene su traje que lo cuida y lo mantiene en perfectas condiciones. Tomamos café y comimos facturas. Y luego nos preparamos para partir hacia el último destino: el establecimiento “4 de Marzo” propiedad de Daniel Arroyo en el cual trabaja nuestra conocida y querida familia Fuster.
El arribo
La ruidosa comitiva arribo a las instalaciones del “4 de marzo” ansiosos de degustar ese exquisito lechón y los pollos cocinados por Héctor en su horno de barro, fabricado por el mismo. Comimos bien, más que bien, pregunten, sino, a Joaquín Garbo que se tuvo que retirar del establecimiento al día siguiente por exceso de lechón. Allí pudimos apreciar un muy buen ejemplo de agricultura familiar. Vimos como se organizaban en el trabajo, como fueron progresando lentamente con las instalaciones, las cosas a favor, las contras y diversas anécdotas contadas con humor por Héctor y Graciela. En el final degustamos unas ricas tortas hechas con todo el amor de la mama de Nico y Jessi. Lo único malo a destacar de la jornada fue el intenso viento que no nos dejo en paz en ningún momento del recorrido.
Agradecemos profundamente a todas las personas que nos recibieron y atendieron dejando de lado sus tareas personales con total desinterés y con pasión. Nos retiramos sintiéndonos plenamente satisfechos de los ejemplos cotidianos que construyen nuestra identidad rural.
Por Franco Alvarez y alumnos de 5° ES.
