Viaje a Sierra de la Ventana

Alumnos, docentes, padres, consejeros y familias del CEPT tuvieron un día de recreación en contacto con el aire puro y el paisaje serrano vecino.

El viernes 3 de noviembre toda la familia CEPT viajó hasta la base del Cerro Bahía Blanca perteneciente al parque Ernesto Tornquist para disfrutar de un día recreativo y conocer un poco más sobre la flora y fauna de la región.

La logística previa fue realizada por la consejera Leticia Vázquez, que reside en Sierra de la Ventana.

A eso de las 9 de la mañana llegaron al lugar y fueron recibidos por guardaparques , quienes contaron la historia del parque y organizaron un paseo guiado entre senderos rodeados de naturaleza. Charlas, juegos, lecturas y buenas historias fueron compartidas en una mañana muy apacible donde el sol empezaba a mostrarse amigablemente.

El  CEPT agradece a Rubén González, encargado del parque Ernesto Tornquist que nos acompañó como guía de un grupo, Romina Gabrielli, guardaparque y guía del otro grupo, Diego Repetto, guardaparque y encargado del plan de Educación Ambiental y a Marcela González, nuestro contacto en la administración del parque.

Al mediodía se juntaron en la base del cerro para compartir un “humilde” almuerzo organizado por docentes , consejeros  y padres(Los docentes Daniel y Alberto, asaron chorizos, un cordero donado por Lucía Cayssials y unas deliciosas tapas de asado servidas con el apoyo de los consejeros “Chiche” de la Torre,Héctor Leunda  y los padres Ditrich, Frick, Dobner, y “Peto” Baigorria.)

Al terminar el suculento almuerzo, chicos y grandes (no tantos) escalaron el cerro Bahía Blanca que tenía cierta dificultad e hizo exigir a más de uno que demostraron una gran voluntad para vencer el cansancio y la falta de aire. Pero el esfuerzo valió la pena y en la cima pudieron disfrutar de un gran paisaje divisando el tamaño del cordón serrano y se tomaron fotos para el recuerdo

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El descenso fue más sencillo y luego de refrescarse o tomar un vaso de chocolatada llegó la hora de un partido de fútbol en el que la experiencia estuvo por sobre la juventud ya que el equipo conformado entre padres y docentes se impuso al de los alumnos.

Para terminar la jornada se realizó un pequeño viaje hasta Sierra de la Ventana para tomar un helado y pasear un rato por las calles del lugar. Con la vuelta al CEPT en el colectivo se dio por terminada una jornada inolvidable en la que chicos de todas las permanencias compartieron momentos intensos junto a sus profesores y familiares.