Respetando el saber popular de
podar en los meses sin “R”, en nuestro Centro se llevó a cabo una jornada de
poda organizada por el entorno de Vivero, a cargo de la profesora Ángela
Grondona. Como es habitual, se invitó a una familia que se dedica al cuidado de
parques y jardines para que nos ayude y asesore, en esta oportunidad fue la
familia Dobner quien muy amablemente se acercó, trayendo sus herramientas de
trabajo y nos explicó cómo trabaja mientras ponía en práctica sus conocimientos
sobre nuestros membrillos, nuestros cotoneaster y el laurel. Los chicos de 5to
y 6to, Santiago -nuestro puestero-, y algunos profes, se animaron a realizar
“podas de formación” sobre los membrillos (se denomina así a la poda que
reciben aquellos ejemplares para dar forma al mismo, favoreciendo la aireación,
y la producción posterior), y a realizar “podas de limpieza” (eliminación de
ramas viejas, torcidas, eliminación de brotes deformados, etc.) sobre los
cotoneaster y el laurel.
Néstor, nos confesó algunos
secretos para evitar entrada de enfermedades luego de podar, otros para generar
enraizantes caseros y orgánicos y otros relacionados a las formas de podar.
El trabajo se transcurrió entre
mates, y luego del almuerzo continuaron las tareas de cuidado del parque.
Agradecemos el aporte de esta
familia, e invitamos a aquellas que quieran compartir sus experiencias a
participar de otra jornada de intercambio de saberes, donde todos nos
enriquezcamos.
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